Este libro surgió a raíz del rodaje del tan laureado documental de Lucija Stojevic “La Chana”, retrato profundo de la bailaora gitana Antonia Santiago Amador. No habla de arte flamenco, sino de algo más grande que lo trasciende: de creación, de ritual, de danza en mayúsculas, como nunca antes se ha hablado. Este es el relato directo de una vida llena en extremo de luces y sombras: éxito y marginalidad, pobreza y riqueza, tormento y éxtasis. La historia de una niña-mujer trágicamente sometida a una vida injusta de la que supo escapar de la manera más inusual y exquisita. Su danza era un auténtico ritual, su sacrificio físico total, su comunión con el público, mágica. El escenario era el lugar sagrado donde cada noche ella se encontraba con el “alli”. Este era su mundo especial, una dimensión diferente donde ella era dueña y señora, donde se sentía totalmente libre y realizada.