Los pendientes son otro de los complementos imprescindibles para el baile flamenco. Los más tradicionales son los aros y argollas, todos ellos realizados con diversos materiales tales como bolas lisas, facetadas, esmaltes, metal. El material estrella es el nácar y carey. Hoy en día estos dos materiales se han sustituido por imitaciones en acetato, sin por ello perder la elegancia.